Para nadie es un secreto que el mundo cada vez más nos ofrece comidas y distracciones que aumentan nuestro peso, y contribuyen a que la taza de obesidad sea cada vez más alta, este no es un problema aislado de algunos países industrializados donde muchos culpan la falta de tiempo para cocinar o hacer deporte, este es un problema mundial y muy serio del que no nos preocupamos sino cuando ya es muy tarde cuando enfermedades cardiovasculares, gastrointestinales, renales, genitales, urinarias, trastornos musculoesqueléticos, neurológicos, respiratorios y psicológicos ya están presentes. Este problema es tan delicado que afecta nuestros niños, ya se ve con más frecuencia como el sobrepeso toma fuerza en esta población tan vulnerable que se ha visto afectada por decisiones de nosotros los adultos quienes somos en ultima instancia los que los alimentamos, y damos ejemplo en lo que corresponde a los hábitos saludables en cuanto a nutrición y deporte. Y es que ya no nos movemos, ascenso